El ocho de diciembre de mil novecientos cincuenta y cuatro, festividad de la Inmaculada Concepción, asistíamos a un memorable hecho de la brillante historia mariana de nuestro pueblo, proclamando Alcaldesa Mayor de Alcalá la Real a la Santísima Virgen de las Mercedes.
Entronizábamos, aquel día, en la vida oficial de Alcalá, a Nuestra Patrona, al otorgarle la más alta distinción jerárquica que, nosotros dentro del ámbito municipal, podíamos concederle. No fue aquel acto otra cosa que testimoniar una vez más y de un modo singular nuestra devoción a la Santísima Virgen.
Nos place recordar aquellos momentos, recurriendo a las notas y borradores que sirvieron para redactar el acta de la sesión plenaria celebrada por el Exmo. Ayuntamiento, un mes después, el ocho de enero de mil novecientos cincuenta y cinco, en la que dábamos cuenta de aquel inolvidable acto.
Así fue:
Siendo las cuatro de la tarde del día 8 de diciembre de mil novecientos cincuenta y cuatro –fecha del primer centenario de la declaración del Dogma de la Inmaculada Concepción, y clausura del Año Santo Mariano, proclamado por Su Santidad el Papa Pio XII--, la Excelentísima Corporación, bajo mazas, se dirigió al templo parroquial de Santa María la Mayor, donde se cantó una salve entonada por el clero y el pueblo, oficiada por el Señor Cura Párroco de dicha iglesia, Don Antonio Camacho Ojeda ante la sagrada imagen de la Santísima Virgen de las Mercedes, y apuesta en andas para salir del templo.
A continuación, terminada que fue la salve, la Corporación Municipal acompañó a Nuestra Madre y Señora, rodeada de su Real Cofradía y de una inmensa muchedumbre, en su traslado procesional a la Plaza del Ayuntamiento, para situar a la Augusta Patrona de Alcalá ante las puertas de las Casas Consistoriales, mirando al pueblo que ocupaba totalmente aquel ámbito. Y en medio del ferviente y clamoroso entusiasmo popular, tuvo lugar el acto de consagración del pueblo al Inmaculado Corazón de María y la proclamación de Alcaldesa Mayor de Alcalá la Real a la Santísima Virgen de las Mercedes.
Situados el Exmo. Señor Capitán General de la Séptima Región Militar, Don Alejandro de Utrilla y Belbel, ilustre hijo de este pueblo y Teniente Hermano Mayor Honorario de la Real Cofradía de Ntra. Sra. De las Mercedes, el Teniente Hermano Mayor efectivo, Don Francisco Casanova Camacho, clero y autoridades en el balcón principal del Ayuntamiento, el Reverendo Padre Puerto, S.J. director de la Santa Misión que finalizaba con este acto, explicó en encendidas palabras el significado de aquellos actos. Terminadas las palabras del Padre Puerto, y en medio de un silencio impresionante, reflejo de la profunda emoción que el momento imprimía en los corazones inflamados de fe, el Señor Alcalde, Don José Collado Martínez, pronunció a través de los micrófonos la invocación. Terminada esta invocación, las personalidades que ocupaban el balcón principal del Ayuntamiento bajaron a la Plaza, situándose todos ante la sagrada imagen de Nuestra Excelsa Patrona; entonces el Alcalde subió a las andas e impuso a la Santísima Virgen de las Mercedes el bastón de mando de Alcaldesa Mayor de Alcalá la Real, mientras resonaban los acordes del Himno Nacional y la emoción incontenible se desbordaba en todos los corazones.
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