La primera imagen que se ponía en la calle era la Mujer Verónica, acompañada por la AM Dulce Nombre de Jesús, que partía desde su ermita, en el paraje de los Llanos, a las 9 de la mañana. Poco después salía desde la calle Santo Tomás de Aquino, la Hermandad del Gallardete de Jesús y desde las proximidades del Silo, el Ecce-Homo. Dirigiéndose todos hasta la iglesia de Consolación, donde a las 11 de la mañana partía el cortejo formado por todas las Cofradías.
El gran colorido de los sayones del Ecce-Homo y el cortejo de escuadrón romano proseguiían la procesión, antecediendo la lámina del Ecce-Homo. Entre todos ellos corría el popular Juillas. También presente en esta parte del cortejo la imagen del Cristo de la Expiración, utilizado en el Paso de la Lanzada por Longinos y su Lazarillo.
Tras este crucificado llegaba el cortejo de la Real Cofradía del Dulce Nombre de Jesús, donde en primer lugar llegaba Jesús Nazareno, sobre un gran monte de clavel rojo y con la túnica bordada. Detrás de este, los Apóstoles, acompañando a Jesús en su camino al calvario.
Y siguiendo el cortejo la Mujer Verónica, San Juan y uno de los grandes estrenos, el nuevo paso con la Virgen del Rosario. Un paso portado a costal y que por primera vez hemos visto con candelería. Además estrenando los fardones del mismo y el techo de palio y caidas del mismo, puesto que las dimensiones son mayores al anterior palio.
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