Siendo su salida prevista a las ocho de la tarde, aplazaron la misma, media hora, por la incertidumbre meteorológica y avisando que realizarían solo el "recorrido corto" por su barrio.
Salía el cortejo procesional donde diversos estrenos vieron la luz, como la restauración de Jesús en el Huerto y el Ángel Confortador, así como un juego de ciriales en madera, que antecedían al paso. Paso exornado con claveles rojos y lirios y que estrenaba parihuela a costal.
Con el paso de Cristo adentrándose a la calle Santo Domingo, proseguía saliendo el cortejo de la dolorosa y minutos más tardes se enfrentaba el palio de María Santísima de la Esperanza al dintel de Consolación y su dificultosa salida. La Reina de la Tejuela, una vez más magistralmente vestida por Álvaro Abril, y con exorno floral de rosas blancas.
Poco antes de las once de la noche ambas imágenes se encontraban nuevamente en el interior del templo.
Tuvo que ser breve, pero la Cofradía del Martes Santo alcalaino, pudo repartir Oración y Esperanza por las calles de Alcalá, una vez más.
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