Por la tarde cuando la Cofradía de Nuestra Señora de la Cabeza esperaba a su Hermana Mayor arreciaba la lluvia y los fieles se reunían en la Ermita de San Marcos poco a poco. Rozando las ocho de la tarde, el cielo comenzaba a despejarse en el horizonte, y la Cofradía decidió salir y realizar el traslado hasta la iglesia de Consolación.
Cofradías Filiales llegadas desde Cabra, Mancha Real, Málaga, Luque, Benalua de las Villas, Granada, Alcaudete, Baena, Jaén, Martos... entre otras abrían el cortejo, a continuación acompañando las mantillas. Proseguían las diferentes Cofradías y Hermandades de la Unión Local de Cofradías de Alcalá, aunque con algunas ausencias. Y antecediendo a la Santísima Virgen parte de su Junta Directiva.
La Virgen, obra del imaginero José Gabriel Martín Simón y el niño, una talla anónima; lucían un terno granate con brocados en oro. Eran portados en las andas de plata, que estrenaban el pasado año, con variedad floral en tonos blancos.
El cortejo procesional llegó hasta la iglesia de Consolación y allí dio la vuelta a la Fuente de la Mora, sin completar el recorrido por el Ayuntamiento y las calles Angustias y Veracruz. Con los sones de Morenita y Pequeñita la Virgen entraba en Consolación, donde mañana, lunes 9 de mayo dará comienzo la novena. Y será el domingo de la Santísima Trinidad, 22 de mayo, cuando vuelva a su ermita de San Marcos.
Mientras tanto... el miércoles día 11, será el Simpecado del Rocío, también grana y oro, protagonista de la mañana, allí estaremos.
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